Las hernias discales se producen por la rotura parcial o total de los discos intervertebrales que se encuentran localizados en toda la columna vertebral, tanto en el cuello como en la espalda baja. Son una causa frecuente de dolor. Cuando la hernia se encuentra en la columna cervical o cuello, el dolor se presenta en los hombros y puede correr a través de los brazos y llegar hasta las manos, presentando sensaciones de hormigueos, calambres y adormecimiento, y va acompañado con debilidad, disminución de la fuerza muscular.
Las hernias de disco en la columna lumbar o espalda baja pueden presentarse como dolor intenso, repetitivo que no disminuye con los medicamentos y en ocasiones el dolor puede correr a través de una o ambas piernas con sensaciones de DESCARGAS ELECTRICAS, hormigueos, calambres y adormecimiento, acompañado con debilidad, disminución de la fuerza muscular y cansancio con limitación para caminar.
Los síntomas y una adecuada exploración del paciente permiten diagnosticar las hernias de disco en el 80% de los casos; sin embargo en ocasiones es necesario realizar estudios complementarios como radiografías o resonancias magnéticas para llegar al diagnóstico final.
Los pacientes que la padecen pueden tratarse de manera conservadora con el uso de medicamentos, cambios en el estilo de vida, pérdida de peso, terapia física y rehabilitación.
Es importante mencionar que solo el 10% de las hernias de disco se tratan con cirugía, cuando la evolución por tratamiento conservador no es óptima, en estos casos se puede utilizar cirugía tradicional o por mínima invasión.